Estados Unidos designa a carteles mexicanos como organizaciones terroristas trasnacionales
La Administración Trump afirma que estos grupos representan un riesgo significativo para la seguridad y la economía estadounidenses.
ESTADOS UNIDOS.- Oficialmente el gobierno de Estados Unidos ha declarado a seis cárteles mexicanos y dos pandillas sudamericanas como organizaciones terroristas trasnacionales. La medida fue anunciada este miércoles por el Departamento de Estado a través de una nota publicada en el Federal Register, el diario oficial del gobierno estadounidense. La decisión responde a una orden ejecutiva firmada por Donald Trump en su primer día como presidente.
Entre los grupos señalados se encuentran el Cártel de Sinaloa, el Cártel Jalisco Nueva Generación, Cárteles Unidos, el Cártel del Noroeste, el Cártel del Golfo y La Nueva Familia Michoacana. Además, fueron añadidos la banda venezolana Tren de Aragua y la Mara Salvatrucha, con presencia en Centroamérica y Norteamérica. En la lista final no figura el Clan del Golfo de Colombia, pese a que había sido mencionado en filtraciones a la prensa.
Razones de la designación
Según la nota firmada por Marco Rubio, estas organizaciones representan una amenaza significativa para la seguridad nacional, la política exterior y la economía de Estados Unidos. La Administración Trump sostiene que los cárteles mexicanos son responsables de la crisis de salud pública causada por el fentanilo y de contribuir a los cruces migratorios irregulares en la frontera.
La designación como organizaciones terroristas permite al gobierno estadounidense aplicar medidas más severas, incluyendo el uso de la fuerza y el combate a las redes financieras que sostienen las operaciones de estos grupos, una estrategia previamente utilizada por George W. Bush contra grupos yihadistas tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. El decreto original nombró a 29 personas y grupos, entre ellas Osama Bin Laden y Aiman al Zawahiri
Impacto en las relaciones México-Estados Unidos
La decisión ha generado tensiones con el gobierno de México, liderado por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien se opone a esta designación y ha advertido que la medida podría vulnerar la soberanía mexicana y ha planteado la posibilidad de expandir las demandas contra los fabricantes de armas estadounidenses, acusándolos de ser cómplices del terrorismo al suministrar arsenales a los delincuentes. Se estima que entre 200,000 y 500,000 armas cruzan anualmente la frontera hacia México, y el 74% de las armas incautadas a los criminales proviene de Estados Unidos.
Además, se ha informado que la CIA ha incrementado sus vuelos de vigilancia sobre territorio mexicano para obtener información sobre los cárteles. Aunque estos operativos ya se realizaban durante la administración de Joe Biden, su frecuencia ha aumentado desde el regreso de Trump a la Casa Blanca. La presidenta Sheinbaum ha señalado que estos vuelos no son ilegales y ha atribuido la polémica a una exageración mediática. A pesar de las diferencias, la mandataria confía en mantener una relación bilateral sólida siempre que se respete la soberanía de México.